Podemos aprovechar nuestra cercanía a la cima de Cuesta Labra para recorrer la zona. Dada la escasa ciclabilidad del trayecto, este recorrido no está incluido en la ruta propuesta. Si queremos explorar el terreno, nos apartaremos temporalmente del recorrido para volver a él una vez concluida la expedición.
Para esta opción, permaneceremos atentos a la parte izquierda del camino hasta encontrarnos con algunas huellas de vehículos todoterreno que se dirigen hasta el alto de Peña Rubia por las que subiremos. A partir de este momento, tanto por el desnivel como por el terreno, el pedaleo se empieza a complicar bastante.
Nuestro pequeño último esfuerzo se va a ver rápidamente recompensado con unas espectaculares vistas.
Nos encontramos al fin en Cuesta Labra (1950m.). Allí, una zona denominada Peñas Majaducas o Campus Regulitanus donde podemos encontrar restos de antiguas edificaciones, algunas de ellas, fortificaciones de la Guerra Civil Española.
En esta zona, cuentan que en las proximidades del año 1600, un pastor riojano encontró una figura de una virgen.
La toponimia de la época se refería a esta zona como El Abra, por lo que la imagen adoptó esta denominación. Dadas las dificultades para que las gentes devotas pudieran acceder a venerar a su patrona , se decidió que esta fuera reubicada en una zona más baja.
Entrado en litigio entre el valle de Campoo y Brañosera por el derecho a la posesión de la virgen, este es resuelto con la primera lluvia. Puesto que la primera gota cae en la zona campurriana, será allí donde se construya una ermita en la zona conocida como Braña de Domingo. La climatología adversa en una gran parte del año, hace que en 1834 se decida su definitivo traslado a la ermita existente en las cercanías de Celada de los Calderones.
Esta es una zona de difícil acceso. No es posible que ningún vehículo de tracción animal hubiese podido acceder allí para transportar el producto acabado. Entonces ¿Por qué se decide emplazar una fábrica en ese lugar?
Un ejemplo le tenemos en Peña Ensillada donde, al parecer, recientemente se le ha dado una explicación satisfactoria a lo que hasta hace poco ha sido considerado una construcción megalítica. Parece ser que este supuesto dolmen no es tal, sino el fruto de restos fragmentados y recolocados gracias a diversos procesos glaciares de erosión.
En esta zona, las grandes rocas, así como las constantes escobas nos van a dificultar mucho nuestro caminar si lo que queremos es descender hasta el collado Somahoz.
Para continuar con nuestro itinerario hasta Gulatrapa, desharemos lo andado hasta volver de nuevo al punto inicial del desvío que tomamos.
Continuando por el camino de la guerra, iremos desde Peña Rubia hasta Peña Astía cercanos a la cordal del Cinto de la Hermandad por un camino en el que encontraremos algunos tramos con trialeras de bastante piedra suelta.
Terminado el tramo marcado, superaremos un fuerte desnivel por un pequeño sendero pedregoso hasta llegar a El Sestil (2063m.). Este punto es el vértice entre la Sierra del Hijar y la Cebollera o el macizo del Valdecebollas.
Desde esta cima veremos el valle de Los Redondos y las lagunas cercanas a la cueva del Cobre, nacimiento del río Pisuerga.
Entre piedras y escobas, nos desplazaremos por la parte alta de Cuenca Pepe, donde brotan las aguas del arroyo Gulatrapa hasta encontrarnos una pequeña torre de piedras. Este será el punto en el que comenzaremos el descenso campo a través por un pequeño sendero hasta llegar a la braña de Guaza Bedul (Guarabedul en algunos textos).
Allí veremos una pequeña cabaña ganadera. Nos encontramos en la zona conocida como Los Lagos.

Todo nuestro camino de regreso a Mazandrero discurrirá ahora por una pista forestal que se adentrará de lleno en el bosque de hayas y abedules de Gulatrapa.
Si deseas descargarte el archivo con la ruta en formato GPX, puedes hacerlo a través de este enlace: Mazandrero-Los Lagos.