domingo, 3 de octubre de 2010

Mary and Max

Salvo en muy pocas ocasiones en las que me atrevo a hacer alguna recomendación, siempre que hablo de cine en este blog es para criticar de forma negativa alguna película.

Por lo general mi participación en el mundo cinematográfico, se limita a asistir como mero espectador pasivo y disfrutar o sufrir con lo que veo. Eso sí, de vez en cuando surge alguna discusión cinematográfica de barra de bar y tampoco puedo faltar a la cita de votar mis visionados en Filmaffinity.

A veces, aparece algún título que por una u otra razón nos despierta algo en nuestro interior. Este es el caso de la película de animación en stop motion "Mary and Max".

Se trata de un filme australiano de 2009 (la ficha técnica podéis verla aquí). Digamos que se trata de un drama, que como suele suceder con este tipo de cine, siempre nos deleita con algún golpe de gracia. Humor negro en muchos casos que nos ayuda a compaginar el snif, snif con el jiji, jiji.


Quizá sea porque hoy se trate de un domingo lluvioso en el que andamos de reclusión doméstica, con el consiguiente "ufff, no sé que hacer ya". Tal vez porque estemos sin la suficiente recarga de energía proviniente de oxígeno fresco, pero el caso es que Mary and Max no me ha dejado en absoluto indiferente.

Se trata de la historia de una niña Australiana, que desde su tierna infancia tuvo que soportar padecer una vida hostil. Un buen día decide escribir una carta al azar y el destinatario resulta ser un cuarentón estadounidense llamado Max.

El tipo decide corresponder a su joven y desconocida amiga invisible y en sus cartas relata su vida, que tampoco resulta ser un camino de rosas. Max padece el denominado "Sindrome de Asperger", un trastorno de la personalidad que le convierte en una persona retraída y alejada de los demás.

La vida de ambos girará en múltiples sentidos, pero con el denominador común de ser víctimas de circunstancias ajenas que les impiden ser felices en sus vidas.

Una muestra de cine cargado de sentimiento y madurez que requiere no menos de estos estados emocionales para poder ser deleitada en su totalidad.

Game Over

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